Reencontrarme con la agrupación Venezolana Desorden Público en el marco de sus 29 años de carrera, resultó una sensación muy reconfortante, volví a descubrir la solidez y la alta evolución de cada uno de sus músicos sobre el escenario.
El concierto orgánico se llevó a cabo en la ciudad de Barquisimeto – Venezuela bajo un matiz acústico e íntimo , eso si, con una antesala de muy bajo nivel; y es que la terrible reseña histórica de la banda proyectada sobre la pared blanquecina del recinto, esa extraña rifa piñatera de discos y calcomanías en tarima, más ese ambiente inmerso en mesas con manteles matrimoniales, dejaba claro que seguimos atascados en el limbo de una frágil producción. Sólo el inicio del primer acorde sobre el escenario logró calcinar dentro de mi , ese incómodo y raro momento.
Esa noche del 30 de agosto y frente a unos decibeles algo exagerados, Desorden Público estalló como bien lo sabe hacer: con grandes éxitos mejorados, un desfile de buenos invitados, y lo más importante , el resurgir de aquel discurso crítico político social posiblemente encapsulado desde hace algún tiempo. Y es que al parecer Horacio Blanco abandonaba aquella postura “ni de aquí ni de allá” que adornaba anteriores presentaciones.
Sin pelos en la lengua el líder de la banda caraqueña disparó una ráfaga de críticas sobre la situación venezolana. Nombrar a Cabello, la ironía de los Zombies que hacen largas colas, lo burlesco de las carpetas cadivi, y los bondadosos dolares lanzados a los asistentes, fueron detonante para el inicio de una euforia colectiva; a tal punto que la concurrencia exigió volcánicamente el tema “Políticos Paralíticos” para cierre del espectáculo, una versión improvisada y bastante punk que la banda interpretó a toda ira y gañote : Políticos, Políticos, MALDITOS POLÍTICOS!. Cabe destacar que frente a mis ojos algunos de estos vampiros enchufados , de zurda y derecha, disfrutaban, tarareaban y marcaban el compás a ritmo de los sordos. Y es que así se mueve el business, así es el espectáculo, así es el nuevo Venezolano.
Les voy a dejar un video exclusivo y un tanto artesanal que pude capturar con mi artefacto de bolsillo; un estreno que formará parte del nuevo disco de Desorden Público en 2015. Una versión del tema “Temperatura” , un clásico editado en 1971 (Picadillo a la criolla) , perteneciente a los puertorriqueños “LeBron Brothers“; aquellos hermanos que radicados en Nueva York lograron fusionar el soul y el rythm & blues con el sonido afroantillano, esos que crearon el Funky blues y los que le agregaron cierto sabor de gospel al movimiento de la salsa.
Larga vida a Desorden Público
Javier Gómez @planetadesimios