El encuentro independiente rosarino realiza una nueva edición con una grilla conformada por un puñado de bandas del universo post-punk
Una de las más gratas novedades de la temporada 2018 del circuito musical autogestivo rosarino fue la aparición del Festival Por Lo Mismo.
Realizado por primera vez en el pasado mes de mayo, el encuentro tuvo lugar en el club social y deportivo Cóndor, espacio recuperado por socios y vecinos hace apenas unos pocos años.
Por Lo Mismo surge de la iniciativa de Gonzalo Roca y Sebastián Tarzia, integrantes del grupo post-punk Belarus. Ambos músicos son veteranos y sobrevivientes de la escena hardcore/punk de finales de los 90, década del 2000, una movida fructífera que supo funcionar como un hervidero de ideas sobre construcciones varias: música, fanzines, arte callejero, distribución artesanal y otras actividades que continúan hasta hoy.
“La idea del festival surge porque somos bastantes inquietos. Siempre nos interesó el tema de juntar diferentes bandas, sean del sello que sean y no cerrarnos en hacer u organizar algo sólo con bandas del sello al cual hoy pertenecemos (Remedio Caseros Discos) ya que la movida de la ciudad es grande y hay muchas bandas que nos gustan”, explica Roca, bajista de Belarus y quien tomó la vanguardia de la organización.
“Hay algo de nostalgia por los festivales de la escena hardcore punk de finales de los 90s, donde uno iba a una plaza o a un club y podía pasar toda una tarde ahí escuchando bandas locales o de afuera, conociendo gente y recorriendo la feria para ver que podía encontrar”, agrega Tarzia, guitarrista y vocalista.
“De esa época, básicamente, y calculo que todo aquel que la vivió dirá lo mismo, aprendimos lecciones sobre lo fundamental de la autogestión, del DIY, de compartir; el hacer lo que se siente y el respeto por sobre todo”, finaliza Roca.
Uno de los aciertos del festival fue el hallazgo del club Cóndor, espacio recuperado del olvido burocrático mediante la movilización de socios y vecino. Desde su recuperación y reapertura, la comisión directiva de la institución decidió perfilarse por una cultura de acceso libre para la comunidad y para el resto de la ciudad. Cada una de las actividades que llegan desde propuestas de terceros o se proponen desde adentro del club se realizan bajo una premisa: entrada libre y gratuita que garantice el libro acceso a todo el público interesado.
“Al club llegamos casi de casualidad, en un afán de buscar lugares nuevos”, señala Roca. “Teníamos referencias del club. Este club fue recuperado hace poco por un grupo de personas y lo llevan adelante con una cuota anual que es muy baja y los socios pueden realizar muchísimas actividades”, apunta Tarzia sobre el funcionamiento del espacio.
La primera edición del festival Por Lo Mismo, congregó a seis propuestas definidas y de sonidos diversos que iban desde el shoegaze al hardcore y del indie pop al post-punk: Moonbones, Víctima Del Vaciamiento, Puesto en Marte, Tensión, Rosedal y Belarus. Entre música en vivo, feria de discos y fanzines y exposición fotográfica de miradas disidentes, esa primera jornada festivalera contó con una circulación de hasta 600 personas demostrando la posibilidad de activar fuera del centro rosarino; construyendo nuevos espacios de dialogo y encuentro de varias generaciones bajo una ética autogestiva.
Si bien el festival propone una curaduría de diversidad estética, las propuestas abrevan, principalmente, del universo ilimitado del post-punk. En esa senda, Por Lo Mismo presenta indie pop a la Manchester con sonidos más opresivos y crudos o pasajes algo más psicodélicos alimentados por guitarras oceánicas o punk visceral o bien veloz y melodioso.
“En Argentina todo se dio forma atrasada en lo que al post-punk se refiere”, observa Tarzia, paciente. Luego se adentra en la cuestión: “Si bien en los 80s hubo bandas mainstream como podrían ser Fricción o Don Cornelio, o bandas más de los antros como Los pillos o Los corrosivos, lo que se generó en ese momento debe haber quedado latente en cuanto al género, porque no es casual que mucha gente del hardcore/punk de los 90s acá en la ciudad ahora esté tocando post-punk. La dictadura tuvo mucho que ver con ese atraso. En otros países se dio de forma lineal el paso de un estilo a otro”.
El próximo sábado 30 de marzo, desde las 17 horas, la grilla se amplía y se conforma por siete bandas locales: Torneo de Verano, Chicle, Rosedal, Dekadencia, Belarus, Tensión y Víctima Del Vaciamiento.
“La grilla la conformamos por grupos que nos gustan” comenta Roca. “Obvio que son muchísimas las bandas que nos hubiera gustado que estén, pero por una cuestión lógica no se pudo. En relación al primero pudimos sumar más bandas”, aclara, a sabiendas que la posibilidad de subir la apuesta tiene que ser de manera medida para lograr una dinámica ágil para el festival.
Por eso su compañero se apresura para detallar que “en la próxima edición van a estar otras bandas, porque nuestra idea es que al menos una vez por año se lleve adelante este Festival y vayan rotando”.