Luego de una brillante carrera que supera las cinco décadas nos deja Freddy Roldán, el más importante vibrafonista de Venezuela.
El primer mes de 2022 no ha terminado y ya hemos visto como el mundo de la música se ha teñido de negro tanto fuera de nuestras fronteras como en nuestro país. Hace pocos días nos llegaron noticias de la partida de Burke Shelley (Budgie) y del maravilloso vocalista Michael Lee Aday, al que todos conocimos como Meat Loaf. Ahora le tocó el turno al mítico Freddy Roldán”, un músico virtuoso con el vibráfono y otros instrumentos de percusión.
Roldán tal vez sea conocido por muchos a través de su maravilloso e innovador trabajo con el grupo Mango, pero si indagamos, su talento le dio otra dimensión a numerosas grabaciones de diferentes artistas que no sólo abarcaban los ritmos latinos, también en el ámbito de la música tradicional venezolana, el jazz, el pop y el rock.
Hacer una lista de los solistas o bandas con quien grabó o acompañó sobre el escenario sería extenso. Su versatilidad quedó demostrada en álbumes trascendentes como “The message” (1971) de Gerry Weil, considerado el primer LP de jazz-rock grabado en el país. También participa en el debut como solista del desaparecido Pablo Manavello (“Cosas sencillas”, 1979) y en varios discos del guitarrista Gonzalo Micó.
Además, Freddy Roldán se sumó ese mismo año a la segunda obra de Aditus (“Aditus/2”) y a los registros de otros grandes del pop-rock venezolano (Ilan Chester, Frank Quintero, Aguilar, Franco de Vita, Colina, Delia, Guillermo Carrasco…), jazz (Olegario Díaz, Pedrito López, Federico Britos-Ruíz, Marisela Leal) o nuestra hermosa y valiosa música venezolana (Simón Díaz, Hernán Gamboa, Gualberto Ibarreto).
Su amplio número de grabaciones sólo es sinónimo de talento y creatividad. Para mi es inolvidable cuando lo vi con la agrupación de su vida (Mango) en la Gira de las Siete Estrellas (1981) donde dejó impresionado a toda la multitud con su versatilidad con el vibráfono, dulzura sonora que también podemos disfrutar de manera perpetua en uno de los trabajos más hermosos que se ha realizado con ese instrumento en cualquier latitud: el tema “Como el tiempo pasa por mi ventana”, incluido en el tercer y último álbum de Frank Quintero y Los Balzehaguaos: “Hechizo” (1978).
El pasado 25 de enero nos dejó Freddy Roldán, pero su partida será siempre opacada por la alegría que nos proporcionó a través de su música. Adiós maestro, tu legado será imperecedero.