El proyecto venezolano acaba de lanzar “Luz”, un LP producido y mezclado por Johann Sánchez en New York y masterizado por Miguel Pardellas en Santiago de Chile
Moises Amaya, alias Holy Hands, tuvo un año prolífico en cuanto a lanzamientos discográficos. Primero fue “País muerto”, un álbum cargado de punk y letras frontales acerca de la política en Venezuela, luego apareció un EP titulado “YUKI“, donde escuchamos atisbos de post-punk y dreampop, concluyendo con el larga duración “Luz”, lanzado a escasos días de 2018.
Tuvimos la oportunidad de hablar con el artista falconiano acerca de este nuevo trabajo, sus expectativas y significados.
“Luz” se anuncia como precuela a tu álbum “País muerto”. ¿Fue un plan abarcar estos lanzamientos de esta forma o surgió de manera espontánea?
Surgió mucho antes de “País muerto”. Fue escrito en 2015 y entre 2015/2016 fue grabado y entregado como proyecto a Johann Sanchez antes de que existiera Amigos de la Casa. “Luz” tomó mucho más tiempo de lo previsto, mientras esperaba por el proceso de producción comencé con la secuela “País muerto“.
Aún siendo “Luz” una precuela de “País muerto”, parece abrir un resquicio de esperanza sobre el futuro de Venezuela. ¿Cómo lo ve Holy Hands?
El álbum comienza de una manera optimista y nostálgica, pero a medida que avanza se va apagando, se va oscureciendo, hasta llegar a un país muerto. Como decía mi madre: “el año que viene todo va a mejorar”, pero a medida que esperabas todo oscurecía más.
¿Habrá una trilogía?
Sí, se llamará “El gran abismo” y no saldrá hasta finales de este año. En abril de 2018 haré un release de un álbum dreampop con 22 temas llamado “AREF”, este girará en torno a mis sueños que anotaba en un cuaderno, es algo mental, nada político y estará mezclado por Ciro Moreno (Panzer, TLX). Luego vendrá “El gran abismo”, la continuación de “País muerto”, la trilogía, un disco mucho más folk que tratará sobre el duro proceso de huir del país, estar en otro lugar solo y compartir la miseria con otros venezolanos, todo basado en experiencias reales.