¿Cómo emprender un viaje por Latinoamérica sin subirse a un micro? Simple. Sólo se necesitan una expresión artística y acceso a Redes Sociales. Ese es el camino que Perotá Chingó encontró, y que le permitió el comienzo de una gira.
Julia Ortiz y Dolores Aguirre son las génesis de este conjunto musical, oriundo, al igual que ellas, de la costa porteña del Río de la Plata. La primera meta fue recorrer los alrededores de la costa uruguaya a dedo, con una guitarra y dos voces, allá por el 2011.
El camino fue productivo para éstas dos muchachas, no sólo para implementar nuevas armonías autóctonas en sus canciones sino porque conocieron a Pocho Álvarez, Martín Donozo, Martín Dacosta y Diego Cotelo. El desenlace del emprendimiento llegó a sus manos. Martín Dacoste en percusión y Diego Cotelo en guitarra, Perotá Chingó estaba completamente conformado.
Ya a partir del 2012 Perotá se paseó por Chile, Brasil, Venezuela, México y Estados Unidos, aterrizando este 2014 en tierras europeas.
Si se buscara una clasificación para la música que Perotá Chingó realiza, se tardaría en encontrar y no se acercaría mucho, excepto notar que el elemento clave completamente palpable a simple escucha es la frescura. Julia y Dolores saben complementar sus voces de tal manera que los matices están presente todo el tiempo y lo tonos emprenden un viaje paralelo, de agudos y graves escénicos.
“Un viajecito” es el primer disco que Perotá Chingó edita en 2012. Lanzado únicamente por internet, en su canal oficial de Youtube. Esta estrategia fue el puntapié para que su música sea escuchada en los demás países de la Patria Grande.
En 2014 nace su segunda producción homónima repleta de esos paisajes sonoros que visten nuestro continente. En este disco se incluyen piezas nuevas como canciones mejoradas del anterior disco; podemos destacar las recientes versiones de “Alma não tem cor” del reconocido músico brasileño André Abujamra o la volátil interpretación de “La Complicidad” de Cultura Profética las cuales brillan por su sutileza.
En una actualidad donde el avance de las Redes Sociales, al mismo tiempo que evoluciona es criticado por el lugar que ocupa en la vida humana, Perotá Chingó se sube al burrito y lo pone en práctica. Como una arista que muestra, que si las Redes se utilizan con fines artísticos y se emplean en su adecuado porcentaje, resultan provechosas.
Perotá Chingó no pretende un masivo consumo de su música, y no está pendiente de las estadísticas que marcan cuántos discos siguen comprando las personas o cuántas canciones bajan por la web. El punto está en que su música sea escuchada y que sus letras produzcan sensaciones, quizás como las que les generó a sus cantantes mientras estaban componiendo. La sencillez, el camino marcado, un mate, una guitarra y una página hicieron de este grupo de amigos la alianza justa para estar recorrer el continente. Si todavía no reservaste tus pasajes, estás a tiempo de pensar otra alternativa.
Jéssica Signoretta @jesignore